Si la compra es el resultado de una emoción, ¿Por qué no utilizamos el marketing emocional para que sea una emoción positiva y se convierta en compra efectiva? No cabe duda que el neuromarketing se está convirtiendo en un factor fundamental en la decisión de compra de nuestra comunidad, y mas cuando dentro de una estrategia de comunicación pasa por acciones social media para poder motivar a nuestros seguidores a nuestro producto (tienda online) o ofrecerles nuestros servicios desde nuestra página corporativa
Según los últimos informes sobre conductas de compra, el 75 % de las decisiones se toman de manera inconsciente, influyendo las emociones en este proceso, nuestro subconsciente crea los sentimientos (emociones) que influyen en la acción de decisión.
Es necesario que dentro de nuestra estrategia de comunicación y las distintas acciones a desarrollar dentro de ellas, encontrar un vínculo afectivo duradero con nuestros seguidores y por tanto por nuestros clientes efectivos. Es una labor de branding, conseguir que nuestra comunidad la sientan y se sientan integrados dentro de nuestra organización, participando y contribuir junto a nosotros en el crecimiento cualitativo y cuantitativo de nuestra y su marca
Hoy en día las marcas es necesario que vendan emociones, crear experiencias de compra, con productos y servicios que lleguen a la mente del consumidor a través de emociones, que nuestra cliente sienta como podemos ayudarle, sin que sea solo el como y qué les vendo.
El marketing emocional tiene que acompañar a nuestra estrategia, como las acciones que se efectúan en el marketing relacional y de venta directa (transacciones), si tengo producto y tengo clientes basemos una estrategía que cubra esa parte dundamental en la decisión de compra, las emociones.
Conocer en cada momento que necesidades y deseos tienen el consumidor, ¿cubre nuestro producto o servicio esas necesidades? si los hemos identificamos y las cubren establezcamos una estrategia de comunicación que posicione el producto bajo esos conceptos emocionales tangibles e intangibles que quiere el consumidor